Los jodedores profesionales

Hoy es uno de los 350 mejores días del año para hablar sobre el filósofo presocrático que introdujo la noción de nous (νοῦς, mente o pensamiento) como elemento fundamental de su concepción filosófica. Sí amiguitos, hoy quería hablaros de Anaxágoras, uno de los 10000 mejores filósofos con barba de la historia, pero no lo voy a hacer. Os concedo el placer de investigarlo por vuestra cuenta para poder saborearlo bien y disfrutarlo. Por eso, he decidido hablaros hoy de otra rama de la filosofía, esa en la que estás en la cama y llaman por teléfono jodiéndote la siesta y no matas a nadie...esa filosofía. Sí amiguitos, hoy voy a hablar de LOS JODEDORES PROFESIONALES, esas personas que han nacido para jodernos la vida. Los coitus interruptus con piernas que encima suelen cobrar por ello.

Mi equipo de investigación y yo mismo hemos desgranado los peores casos. Ahí van:

Jodienda 1: después de comer encuentras en el sofá la silueta buena y te incrustas en ella mientras se te ponen los ojos en blanco del placer sexual que sientes en ese momento. Convences a alguien de que te tape con una manta, cierras los ojos lentamente y... El teléfono suena. Eso solo puede significar 2 cosas: o ha pasado algo grave y mortal o es una compañía telefónica donde una chica dulce y sudamericana trata de venderte una nueva tarifa. Pues oye, jamás ha muerto nadie. Siempre es la opción de la telefonía...ya es mala suerte, joder!!!

Jodienda 2: estás comiendo un trozo de carne, de esos que tendrás que hacer palanca con el palillo para quitarte el kilo de vaca de entre los dientes, entonces viene un vegano y... Perdón, los veganos no son todavía jodedores profesionales. Creo que lo hacen por placer, de forma amateur.

Jodienda 3: estás en la cama un domingo a las 12h y te despiertas. Algo va mal. Demasiado silencio donde debería haber hijos. Despiertas a tu pareja sobresaltado y esta, de malas maneras, te recuerda que vuestra descendencia ha dormido en casa de tu suegra y que no están. No están... ¡No están! Antes de que hayáis acabado la frase ya le estás quitando a tu pareja la camiseta de Simago que tiene por pijama y ella te pide, con mimitos, que la quieras salvajemente. No te haces de rogar. Además, por fin podréis follar haciendo ruido, gemir en voz alta... el sumun del sexo de padres, el mito del sexo sonoro del que tanto hablan los solteros. Cuando de repente...el timbre...el peor sonido posible para este tipo de sexo. Testigos de Jehová, que quieren dejarte una revista con dibujitos de animales y arco iris. ¿Cómo coño vas a hacerte de una religión que permite trabajar en domingo? ¡Vestido de domingo! Pero no vestido con chandal que es como yo voy en el día del señor, no... Vestidos de comunión. Total, bajonazo. Vuelves esperanzado a por tu sexo salvaje mañanero sonoro pero se han cambiado de planes sin avisar. Hay que limpiar la casa.

Jodienda 4: Después de una larga jornada de trabajo llega el momento de relajarte viendo una película o un partido mientras cenas cosas con colesterol y aceite de palma. Llaman al teléfono. La hora de la siesta ya ha pasado así que no puede ser Vodafone. Lo coges por si ha pasado algo...pero no, esta vez tampoco. Es alguien que quiere hacerte una encuesta de 3 minutos que después dura un cuarto de hora sobre consumo en el hogar, que acaba siendo de si vas a comprar a la Maquinista o a Glòries. En este caso yo suelo preguntarles si quieren comprarme un libro (mano de santo, oiga) o les digo que llamen por la mañana (truco magistral porque trabajo por las mañanas y solo está en casa mi mujer. Lo siento cari, se trata de supervivencia). En cualquier caso ya te has perdido 3 goles de Messi o Mario Casas ya se ha quitado la camiseta 5 veces. Matar a alguien en ese momento no es ilegal ni está mal visto.

Jodienda 5: Cuando tienen que traerte algo a casa o han de venir a arreglarte alguna cosa. "Llegaremos entre las 3 y las 4" te dicen. "¿Seguro? Mire que yo a las 16:30 tengo que ir a buscar a mi hija al cole", le contestas. "Sí, sí. Estese tranquilo". Te quedas sin siesta por si vinieran a las 15h pero va a ser que no.15:15, nada. 15:30, nadie. 15:45, un matojo de plantas secas, como en los desiertos de las películas del oeste, cruza tu comedor. 16:00, cric cric, cric cric. Te empiezas a poner nervioso. 16:15, igual. 16:25 vas a buscar a tu hija. 16:31, te llaman para decirte que han pasado por tu casa pero como no abría nadie se han ido a otro servicio. ¡Malditos perros! Y te dejan de muy mal humor, con la fuga de agua en casa (en mi caso siempre son escapes de agua) y con un montón de "hijosdeputa" en la boca buscando destinos.

Hay muchos más jodedores que trabajan gratis: las señoras que se cuelan en los supers; los señores que se quedan parados en los pasos de cebra y solo cuando paras para que pasen te dicen que sigas tú, que él ya pasará; los niños que juegan con los móviles en los bares con la músiquita del cundy crush a todo volumen sin que a sus padres parezca molestarle; los que tiran petardos o dejan a sus hijos de 7 años con un mechero y una bolsa llena de ellos; el vecino del taladro; etc, etc, etc, y miles de etc... Pero me guardo el derecho a hablar de ellos en otras ocasiones y/o investigaciones.

La vida está para disfrutarla y no para que te la jodan. Sed buenas personas y respetad las siestas ajenas.

Pd: esta reflexión puede contener trazas de realidad. Ningún teleoperador de Vodafone a sufrido daño en esta investigación... Muy a mi pesar.

descarga (2)