top of page

La masturbación y yo

  • Foto del escritor: jramonvera
    jramonvera
  • 29 jun 2018
  • 4 Min. de lectura

Ahora que los niños ya están de vacaciones y pueden leer mis reflexiones he pensado que debo omitir el lenguaje soez y las escenas de sexo y violencia, no sea que me echen a mí la culpa si después salen psicópatas, adolescentes o cosas peores. Por eso, hoy voy a hablar de algo que sustituye al sexo. Sí amiguitos hoy voy a hablaros de La MASTURBACIÓN (másculina), esa forma diferente y placentera de decirte que te quieres. ¿Sabéis cuando, sobretodo las adolescentes, se enamoran de un cantante o un chico mayor y ni comen ni duermen hasta que no lo ven 5 segundos por la ventana de su casa? ¿Sabéis estas chicas que hacen 80 horas de cola a temperaturas bajo cero para conseguir entradas para ver a su Pablito Alborán o al cantante "guapo" de turno que canta mermelada musical? Pues los chicos no sabemos qué es eso. Nos podemos enamorar de ese modo, claro que sí, pero después nos hacemos una paja y se nos pasa. Quedaos con este concepto. Un buen masturbador ¿nace o se hace? Yo creo que es una combinación de los dos. Hay que tener una buena predisposición genética pero hay también que trabajar duro para poder dar placer a quien más quieres. Mi equipo de investigación, compuesto por un adolescente, un informático, un profesor universitario, un mono y por mí mismo, os damos las claves para subministraros placer de la forma más manual que existe. Como todos sabréis por anteriores reflexiones y por ver los documentales de La 2, la palabra "porno" es un término griego, sin embargo "masturbación" es latina... Latina del latín, no en plan Jennifer López ¡Que también! Proviene del término "manu túrbare", turbar con la mano o poner el turbo con la mano. Aunque los romanos eran mucho de turbarse hay que decir que no fueron los primeros. El primero en hacerlo fue Adán. Hasta que se le ocurrió cambiar una costilla por una chica se le estaba haciendo muy largo lo del paraiso. Esto es así. A mí me gusta mucho el sexo... tanto que incluso disfruto haciéndomelo a mí mismo, y eso que soy antilujúrico. Seguramente esté mal masturbarse, porque si el amor todo lo cura, la gayola sería automedicación y eso no solo es peligroso sino que puede provocar adicción, como sabrá el 82% de los hombres. De todas maneras yo me arriesgo, me turbo aunque la gente piense que soy un enfermo. De hecho, es posible que lo sea pero después me automedico y chimpún. Una paja, del verbo latino <pascere> "apaciguar" (sí, apaciguar, quedaos también con este concepto ), es al sexo lo que un chicle a la gastronomía. Engaña un rato al hambre pero no alimenta. A mí, me gustan los chicles y las croquetas (no al mismo tiempo, eso sí) al igual que me gusta el sexo con otra(s) persona(s) y el sexo conmigo. Me gusta compartir cama pero también me gusta decirme a mi mismo cosas bonitas y guarradas al oído o incluso darme un cachete en el culo mientras me hago el amor con amor. Vale... Ya sabéis más de mí de lo que deberíais. Como en todas las cosas buenas en la vida siempre hay algo o alguien que tratan de joderlo. "No comas donuts que tiene mucho colesterol", "no folles con tu prima que os saldrán los niños tontos", "no bebas tanto café que no podrás dormir", "no veas Grease porque... Con esto no hay nada malo... ¡Peliculón! Por raro que parezca, muchos curas ven mal esta práctica (solo si hay una relación heterosexual entre dos adultos. Si es homosexual con niños no pasa nada) y muchos tontos han tratado de vender que acariciarse el pene es una aberración. Incluso aseguran que te crecen las dioptrias (Yo ya voy por 5) pero lo cierto es que es, junto al fútbol, una de las pocas cosas que tenemos en común todos los hombres. Da igual la orientación sexual, la raza, la nacionalidad (tengo mis dudas con Noruega, su alto indice de suicidios me hace sospechar que se la cascan poco), el credo, clase social y record de puntuación en el tetris. Pensad que personas como Pep Guardiola, Emilio Aragón, Juan Carlos I, Federer (este sin llegar a sudar, eso sí), Bertín Osborne, Risto Mejide, Michel, Eduard Punset o lo que queda del actor antes conocido como Schwarzenegger, también se masturban ¿Sabéis quienes no se turbaban con la mano de vez en cuando? Michael Jackson, el Papa Juan Pablo II, Hitler y Samaranch... Estaréis de acuerdo que todos eran raritos pero es que además ¡Están todos muertos! ¿Casualidad? Puede ser, pero yo me la pelo por si acaso. No me cuesta nada curarme en salud. Ya que estamos hablando de ciencia aplicada a la masturbación, me gustaría desmentir una de las leyendas urbanas alrededor del mundo de consolarse a uno mismo. Dice la leyenda que si te sientas sobre tu mano mala y esperas a que se te duerma, masturbarse después con ella es como si te lo hiciera otra persona. Esto es completamente falso pero corre por los mentideros de la adolescencia como la polvora, así que es posible que veais alguna vez a algún hombre amarse con la mano mala. Es normal. Igual alguna mujer piensa que esto me lo acabo de inventar, pues bien, que pregunte a su marido, padre o hijos. Ellos seguro que lo han probado. Y ahora os dejo, que tengo que hacer una cosa. PD: Esta reflexión puede contener trazas de realidad. Emilio Aragón dudo mucho que haya sufrido daño durante el transcurso de esta investigación, más bien al contrario.

 
 
 

Comentarios


Entradas destacadas
Vuelve pronto
Una vez que se publiquen entradas, las verás aquí.
Entradas recientes
Archivo
Buscar por tags
Síguenos
  • Facebook Basic Square
  • Twitter Basic Square
  • Google+ Basic Square

¡SÍGUEME! 

  • Facebook Classic
  • Twitter Classic

© 2016 Jose Ramón Vera

bottom of page