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Los 80 y yo

  • Foto del escritor: jramonvera
    jramonvera
  • 27 feb 2019
  • 5 Min. de lectura

Hoy iba a hablar sobre la Ley de inercia de Sylvester pero, como sabéis, es imposible hacerlo sin unos conocimientos mínimos de espacios vectoriales y me temo que no todos reconoceríais un espacio vectorial aunque lo tuvierais delante de vuestras propias narices, así que he decidido hablar de sintetizadores, laca, hombreras y Mayra Gómez Kemp. Sí amiguitos, hoy voy a hablar de LOS 80, la década donde Jordi Hurtado empezó a parecerse al Jordi Hurtado de ahora. La gente que en algún momento de sus vidas me ha visto vestido sabe que nunca me he regido por las modas, pero tengo una hija que es normal y que sí lo hace. Últimamente todo lo que quiere comprar de ropa es del estilo de los 80. Si le pones unas J'hayber y unos calentadores ya estará lista para poner a toda pastilla el Thriller de Michael Jackson en el radiocasette de su Delorean y viajar a la década dorada de... La mejor década en cuanto a... esto...ejem... ¡la década ideal para los que nacimos en los 70! Como ella es adolescente y yo solo soy su padre, tiene como primera premisa en su cerebro el no escucharme, así que os jodéis porque mi equipo de investigación y yo os vamos a contar a vosotros como fueron los 80 en realidad... A ver si así alguien me escucha antes de que llegue el apocatástasis (Guiño, codazo, guiño a Andres Hernandez Rabal). MODA: llamar moda a la moda de aquella época es muy gordo y totalmente injusto. Todo valía, era la anarquía. Podríamos reducirlo todo a hombreras, maquillaje extremo, corbatas finas y relojes con luz y calculadora (el abuelo del siri). Combina esto con cualquier cosa que tengas en tu armario, de cualquier época, y ya vas vestido de los 80. De hecho, si te pones falda y te dejas una coletilla, irás de Miguel Bosé. Sí, es verdad que fuimos capaces de desprendernos de los pantalones de campana y por fin los niños pudimos dejar de ir al cole en invierno con pantalón corto y pasamontañas (una tortura, y no solo a nivel estético), pero no compensa. Para llevar tu mochila a la moda podías llenarla de llaveros o, si tenías mas clase, ponerle unos elegantes chinitos de la suerte. Cardados y permanentes decoraban las cabezas adultas, mientras que a los niños nos embadurnaban el pelo con colonia y nos lo repeinaban para atrás. Si no te caía una gota de colonia por la nuca camino del cole es que no estabas bien peinado. TELE: solo había dos canales y uno era una mierda, así que te tocaba apechugar con Naranjito sí o sí...Pero no todo era tan malo, teníamos el Un, dos, tres y Con las manos en la masa. Como las "buenas" pelis (Bruce Lee, Pajares, Bud Spencer y Terence Hill, Burt Reynolds, etc...) siempre estaban cogidas en el videoclub, te tocaba ver con tus padres, Dallas, Falcon Crest, El pájaro espino o peor, el teletexto. A veces se interrumpía la emisión, y ponían un pantallazo pidiendo disculpas con dibujos del spectrum hipermegapixelados, pero solo cuando daban lo que te gustaba: Fama, el coche fantástico, V, MacGyver o cuando daban algo de dos rombos que tú veías de reojo, como si del mismísimo porno se tratase. Los dibujos eran sobre libros (la vuelta al mundo en 80 días, Dartacán, Ulises 31, Tom Sawyer, el Pequeño Cid, etc...) por lo que nos convalidaban literatura en el cole. Para todas las demás asignaturas veíamos la saga de "Erase una vez" mientras nuestras madres nos metían una tableta de chocolate dentro de un trozo de pan para merendar. Estudiar viendo dibujos te permitía no hacer nada por las tardes mientras que ahora nuestros hijos malgastan sus horas vespertinas en extraescolares y en hacer deberes. Hacían programas musicales... Sí, sí, como os lo digo. Ver Rockopop o Tocata era guay porque al no existir youtube no solías ver a tus cantantes favoritos. Desde aquí quisiera reivindicar una gran serie que ha sido injustamente olvidada: Los cuentos del mono de oro. Y ya que estoy... Una duda... Aparte de mí ¿alguien se acuerda de las series españolas como "su media naranja", "tristeza de amor", "brigada central", "segunda enseñanza" o "turno de oficio"?... ¿O soy yo, que estoy enfermo? DIVERSIÓN: Aún me pregunto cómo sobrevivimos sin Netflix ni RadioMarca. Aunque si hablamos de supervivencia habría que empezar por los parques infantiles y los viajes en coche. Jugar con la peonza, el yoyo, las canicas o la goma puede parecer divertido, solo que no lo es, al menos si lo comparamos con poner morritos en instagram o poner corazones en whatsapp después de cada frase. Si te aburrías, siempre podías rebobinar las cintas con un boli o poner tus juegos de ordenador media hora a cargar para poder jugar después. Los niños de aquella época teníamos menos tiempo para jugar que los de ahora ya que haciamos algo siniestro que a los niñatos de ahora sonará a chino... ¡¡¡Hacer recados!!! Pero estaba bien porque te gastabas el cambio en las salas recreativas jugando al Street fighter o al Tetris. Los sábados ibas a comprar en ese espacio de tiempo que había entre La bola de cristal y Gente Joven. MÚSICA: se podría resumir la evolución de la música en este país en los últimos 40 años con esta premisa: el enchufe que quedó libre al desenchufar el sintetizador lo han aprovechado las teles para enchufar ahora un ventilador que alborote el pelo de las cantantes de turno. Si preguntas a cualquiera de mi edad te dirá que la música española en los 80 era la hostia... Que si la libertad... Que si el verdadero artista... Pues bien, escuchad, la música en los 80 era una mierda. La creatividad de los músicos llegaba justito para ponerle el nombre al grupo o decidir la ropa o el atrezzo que debían llevar. Así salieron grupos como Dinamita pa' los pollos, No me pises que llevo chanclas, Un pingüino en mi ascensor, Tarzán y su puta madre buscan piso en alcobendas, o mi preferido Alex y Cristina (en una muestra clara de originalidad). Las neuronas que les quedaban después de poner el nombre y consumir estupefacientes ya os digo que no la invertían en clases de canto. Las letras eran malas (vease en youtube videos de Almodovar y MacNamara) y ni siquiera un genio como Pablo Carbonell llegó más allá de una agüita amarilla. Mecano y Hombres G eran los grandes referentes. Mención especial para Alaska, que en los 80. cantaba lo de "mi novio es un zombi" y oye, ole su coño, porque no ha parado hasta casarse con uno. Los cantautores aún hacían denuncia social, no como los de ahora, que hablan del amor con baladitas ridículas en toooooodas sus canciones. También estaban muy de moda los cantantes que traducían sus canciones al español y así es como fue que gentuza como Glenn Medeiros hicieron fortuna. Yo creo que por hoy voy a parar, porque como hable del cubo de Rubik, de la superPop, de Kirk Cameron, el debate sobre el estado de la nación de Luis del olmo, las empanadillas de Móstoles o Los Goonies, no podré ya parar. PD: ¿Sabéis quien nació en los 80 y fue amamantado en los pechos de su madre, de Samantha Fox y de Sabrina? Exacto, Roger Wilson, autor del dibujo. PD2: Esta reflexión puede contener trazas de realidad. Como en los capítulos del Equipo A, donde después de explosiones, accidentes de coches y tiros, todos salían por su propio pie, en esta investigación tampoco nadie ha resultado herido.


 
 
 

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